No puedes detener las olas pero puedes aprender a surfearlas.

«Así como no podemos calmar las olas del mar, tampoco podemos eliminar las olas de nuestra mente.
Intentarlo creará más lucha y tensión interna. Gracias a la meditación nos resguardamos de los vientos que agitan la mente.
La meditación no es una manipulación interna que va a apagar mágicamente esas olas, pero puede ser un refugio de gran parte del viento que agita la mente. Con el tiempo puede extinguirse una buena parte de la turbulencia al dejar de alimentarla.
A la larga, los vientos de la vida y de la mente soplarán, hagamos lo que hagamos. La meditación tiene que ver con saber algo acerca de esto y acerca de cómo trabajar con ello.
No puedes detener las olas pero puedes aprender a surfearlas.»
Jon Kabat-Zinn
